Objetivo Plan Marco

Queremos anunciar, de modo renovado, la novedad transformadora de la Buena Noticia de Jesús a toda la comunidad educativa, desde el carisma vicenciano, como proyecto de vida personal y comunitario, y como un compromiso por la justicia y con los más pobres.




martes, 29 de abril de 2014

Canción: Yo soy libre, oh gloria a Dios

Este canto de alegría por la Resurrección de Jesús lo podemos cantar estos días en las tutorías. También lo haremos en la Marcha Mariana que ya estamos preparando con mucha ilusión.



Gloria, Gloria, Aleluya.
Yo soy libre, oh Gloria, Gloria a Dios
Gloria, Gloria, Aleluya... Yo soy libre
Oh Gloria Gloria a Dios

Mi pasado está borrado
Yo soy libre, oh Gloria, Gloria a Dios
Ya estoy limpio, fui cambiado
Yo soy libre, Oh Gloria, Gloria a Dios

Ni tristezas, ni dolores
Yo soy libre, oh Gloria, Gloria a Dios
Mis mañanas de colores resplandecen
Oh Gloria, Gloria a Dios. 

lunes, 28 de abril de 2014

Campamentos JMV 2014


Los CAMPAMENTOS de JMV son del 15 al 25 Julio.

5º y 6º de Primaria en Tui (Pontevedra).

Los cursos de la ESO en La Mata de Curueño (León).

Los de 4º ESO tendrán unos días en La Mata y luego saldrán para Benagalbón (Málaga).

domingo, 27 de abril de 2014

JMV Marcha Mariana 2014


Fecha: Sábado 10 de mayo de 2014.
Localidad: A ILLA DE AROUSA  (Pontevedra).

Ø Participan: JMV de 4º EP a 2º ESO + Familias   
Ø  Todos los grupos de JMV de Galicia.

Autobús: Empresa Lucho – VIGO
Hora de salida: 8.45 h – c/ Arenal, 92 – Regreso: 19.30 h

LLEVAR: Bocata y bebida para comida y merienda.
Chubasquero, calzado para caminar y PAÑUELO JMV.

APORTAR: Amistad, aire de fiesta, ganas de compartir y celebrar la vida.

ECONOMÍA (autobús): 12 €
Pañuelo JMV (el que no lo tenga, 3 €)

CATAMARÁN (optativo): 7,00 €

ACOMPAÑAN: Catequistas, profesoras y familias. 

Fecha tope de entrega: 4 de Mayo.

¡Os esperamos a todos!

sábado, 26 de abril de 2014

Testigos de la RESURRECCIÓN

Cuentan que, en cierta ocasión, llegó un misionero a un pueblo indígena. Los habitantes del pueblo recibieron al misionero con grandes atenciones y se dispusieron a escucharlo.
-Vengo a traerles una Buena Nueva, la noticia de un Dios Padre, que nos quiere a todos y desea que vivamos como auténticos hermanos, sirviéndonos y ayudándonos unos a otros. ¿Van a aceptar la noticia que les traigo y a recibir en sus corazones a ese Dios Padre que nos ama a todos como verdaderos hijos?
Calló el misionero y los indígenas permanecían en silencio.
-¿Lo aceptan o no lo aceptan?- insistió desconcertado el misionero.
Al rato, se alzó serena la voz del cacique diciendo:
-Quédate a vivir con nosotros unos días y si en verdad vives lo que quieres enseñarnos, entonces volveremos a escucharte.

Estas semanas de Pascua estamos intentando vivir  la Resurrección de Jesús. Es una realidad que te puede llevar a coger con ganas tu vida, a valorarte tal como eres, a vivir con esperanza… porque Dios está contigo. Esto se tiene que notar. Debemos cambiar el derrotismo, el mal humor o la falta de sensibilidad con los demás, por la alegría, la amistad sincera y el compromiso con los demásTodos los días de la semana, son ocasión para vivir en clave de Resurrección.

Canción: Alelu, aleluya



Este canto lo aprenderán muy bien los más pequeños del colegio. Para ellos que disfrutan tanto cantando.

jueves, 24 de abril de 2014

Cristo sigue resucitando


Confesamos que Jesús ha resucitado  y vive. 
Ésta es la gran noticia.
Es el paso de Dios por nuestra vida,
no lo vemos, ni palpamos,
pero sentimos que somos amados y lo amamos.
Creemos que no sólo ha resucitado,
sino que está resucitando
 en cada uno de nosotros.
¿Por qué no conseguir 
esas pequeñas resurrecciones
que son las que tenemos en nuestras manos ?
Ése es el gran milagro 
de nuestra condición humana,
que nosotros podemos “colaborar”
en esa resurrección.

Cristo sigue resucitando: 
Cada vez que nos queremos,
cada vez que abrimos y ofrecemos nuestras manos,
cada vez que compartimos con el otro,
cada vez que nos superamos,
 cada vez que perdonamos,

cada vez que cargamos con el prójimo,

cada vez que damos lo que tenemos

 y ofrecemos lo que somos,
cada vez que creamos y engendramos,
cada vez que rompemos ataduras,
cada vez que levantamos al caído y marginado,
cada vez que pacificamos,
 cada vez que sembramos alegría,
cada vez que cultivamos la esperanza,
cada vez que hacemos comunión, familia,
cada vez que nos hacemos como niños,
cada vez que en amor florecen nuestras manos,
cada vez que oramos en Espíritu

y en Espíritu gritamos.

martes, 22 de abril de 2014

Felicitación Pascual del Papa Francisco

Queridos hermanos y hermanas, ¡buenos días! ¡Felices Pascuas!, “¡Cristo ha resucitado! –  ¡Está entre nosotros aquí!. En esta semana podemos seguir intercambiándonos la felicitación pascual, como si fuera un único día. Es el gran día que hizo el Señor.
El sentimiento dominante que transluce de los relatos evangélicos de la Resurrección es la alegría que viene desde adentro; y en la Liturgia nosotros revivimos el estado de ánimo de los discípulos por la noticia que las mujeres habían dado: ¡Jesús ha resucitado! Nosotros lo hemos visto.
Dejemos que esta experiencia, impresa en el Evangelio, se imprima también en nuestros corazones y se vea en nuestra vida. Dejemos que el estupor gozoso del Domingo de Pascua se irradie en los pensamientos, en las miradas, en las actitudes, en los gestos y en las palabras… ojalá seamos así luminosos. ¡Pero esto no es un maquillaje! Viene desde dentro, de un corazón inmerso en la fuente de esta alegría, como el de María Magdalena, que lloró por la pérdida de su Señor y no creía a sus ojos viéndolo resucitado.
Quien hace esta experiencia se convierte en testigo de la Resurrección, porque en cierto sentido ha resucitado él mismo, ha resucitado ella misma. Entonces es capaz de llevar un “rayo” de la luz del Resucitado en las diversas situaciones: en las felices, haciéndolas más bellas y preservándolas del egoísmo; y en las dolorosas, llevando serenidad y esperanza.
(...)
¡Feliz y santa Pascua a todos y hasta pronto!
Papa Francisco

Canción: Estoy alegre



Esta canción refleja nuestra alegría que tenemos siendo niños por la Resurrección de Jesús. Nos dice: "Cristo un día me salvó y también me transformó y por eso alegre estoy".

miércoles, 9 de abril de 2014

Celebración del Perdón


Ayer martes celebramos con los alumnos de 4º de Primaria a 4º ESO una celebración del Perdón. Reunimos a los tres grupos de Primaria y aparte hicimos dos celebraciones con los pequeños de la ESO y otra con los mayores. Seguimos la dinámica de la lavadora. Cada uno debía escribir en una camiseta blanca algo que deseaba que fuese lavado en la lavadora (limitaciones, faltas...). Fueron momentos para pensar, para caer en la cuenta, para encajar piezas en la cabeza, para comprender al ser humano, para ser más positivos e incluso para sentir próximo a nuestro Padre Dios, que siempre nos perdona y nos da oportunidades.

Por la tarde el claustro de profesores nos reunimos en la capilla para rezar con la misma dinámica que se usó con los alumnos por la mañana.

lunes, 7 de abril de 2014

Canción: "Tomado de la mano"



Los alumnos de Infantil han entendido muy bien y les ha encantado el vídeo de la Parábola de la Oveja Perdida. Hoy han coloreado un dibujo precioso que han preparado sus profes para ellos. Desde aquí les regalamos una canción para que lo puedan disfrutar aún más.

domingo, 6 de abril de 2014

Parábola del fariseo y el publicano

5º domingo Cuaresma ciclo A

De  Odres Nuevos

Blog Personal de Fernando Mosteiro

Lectura del santo evangelio según san Juan (11,3-7.17.20-27.33b-45):
En aquel tiempo, las hermanas de Lázaro mandaron recado a Jesús, diciendo: «Señor, tu amigo está enfermo.»
Jesús, al oírlo, dijo: «Esta enfermedad no acabará en la muerte, sino que servirá para la gloria de Dios, para que el Hijo de Dios sea glorificado por ella.»
Jesús amaba a Marta, a su hermana y a Lázaro. Cuando se enteró de que estaba enfermo, se quedó todavía dos días en donde estaba.
Sólo entonces dice a sus discípulos: «Vamos otra vez a Judea.»
Cuando Jesús llegó, Lázaro llevaba ya cuatro días enterrado. Cuando Marta se enteró de que llegaba Jesús, salió a su encuentro, mientras María se quedaba en casa.
Y dijo Marta a Jesús: «Señor, si hubieras estado aquí no habría muerto mi hermano. Pero aún ahora sé que todo lo que pidas a Dios, Dios te lo concederá.»
Jesús le dijo: «Tu hermano resucitará.»
Marta respondió: «Sé que resucitará en la resurrección del último día.»
Jesús le dice: «Yo soy la resurrección y la vida: el que cree en mí, aunque haya muerto, vivirá; y el que está vivo y cree en mí, no morirá para siempre. ¿Crees esto?»
Ella le contestó: «Sí, Señor: yo creo que tú eres el Mesías, el Hijo de Dios, el que tenía que venir al mundo.»
Jesús sollozó y, muy conmovido, preguntó: «¿Dónde lo habéis enterrado?»
Le contestaron: «Señor, ven a verlo.»
Jesús se echó a llorar. Los judíos comentaban: «¡Cómo lo quería!»
Pero algunos dijeron: «Y uno que le ha abierto los ojos a un ciego, ¿no podía haber impedido que muriera éste?»
Jesús, sollozando de nuevo, llega al sepulcro. Era una cavidad cubierta con una losa.
Dice Jesús: «Quitad la losa.»
Marta, la hermana del muerto, le dice: «Señor, ya huele mal, porque lleva cuatro días.»
Jesús le dice: «¿No te he dicho que si crees verás la gloria de Dios?»
Entonces quitaron la losa.
Jesús, levantando los ojos a lo alto, dijo: «Padre, te doy gracias porque me has escuchado; yo sé que tú me escuchas siempre; pero lo digo por la gente que me rodea, para que crean que tú me has enviado.»
Y dicho esto, gritó con voz potente: «Lázaro, ven afuera.»
El muerto salió, los pies y las manos atados con vendas, y la cara envuelta en un sudario.
Jesús les dijo: «Desatadlo y dejadlo andar.»
Y muchos judíos que habían venido a casa de María, al ver lo que había hecho Jesús, creyeron en él.
Palabra del Señor

UN PROFETA QUE LLORA

Jesús nunca oculta su cariño hacia tres hermanos que viven en Betania. Son los que lo acogen en su casa siempre que sube a Jerusalén. Un día Jesús recibe un recado: nuestro hermano Lázaro, “tu amigo”, está enfermo. Cuando se presenta, Lázaro ha muerto ya. Al verlo llegar, María, la hermana más joven, se echa a llorar. Nadie la puede consolar. Al ver llorar a su amiga y también a los judíos que la acompañan, Jesús no puede contenerse. También él “se echa a llorar” junto a ellos. La gente comenta: “¡Cómo lo quería!“.
Jesús no llora solo por la muerte de un amigo muy querido. Se le rompe el alma al sentir la impotencia de todos ante la muerte. ¿Por qué hemos de morir? ¿Por qué la vida no es más dichosa, más larga, más segura, más vida?
El hombre de hoy, como el de todas las épocas, lleva clavada en su corazón la pregunta más inquietante y más difícil de responder: ¿Qué va a ser de todos nosotros? Es inútil engañarnos. ¿Qué podemos hacer? ¿Rebelarnos? ¿Deprimirnos?
La reacción más generalizada es olvidarnos. Pero, ¿no está el ser humano llamado a vivir su vida y a vivirse a sí mismo con lucidez y responsabilidad? ¿Solo a nuestro final hemos de acercarnos de forma inconsciente sin tomar postura alguna?
Ante el misterio último de nuestro destino no es posible apelar a dogmas científicos ni religiosos. No nos pueden guiar más allá de esta vida. Más honrada parece la postura del escultor Eduardo Chillida al que, en cierta ocasión, le escuché decir: “De la muerte, la razón me dice que es definitiva. De la razón, la razón me dice que es limitada”.
Los cristianos no sabemos de la otra vida más que los demás. También nosotros nos hemos de acercar con humildad al hecho oscuro de nuestra muerte. Lo hacemos con una confianza radical en la Bondad del Misterio de Dios que vislumbramos en Jesús, al que, sin haberlo visto, amamos y, sin verlo aún, le damos nuestra confianza.
Esta confianza no puede ser entendida desde fuera. Sólo puede ser vivida por quien ha respondido, con fe sencilla, a las palabras de Jesús: “Yo soy la resurrección y la vida. ¿Crees tú esto?”. Recientemente, Hans Küng, el teólogo católico más crítico del siglo veinte, cercano ya a su final, ha dicho que para él morirse es “descansar en el misterio de la misericordia de Dios”.